Ya he contado los sombreros , los zapatos rojos, los blancos y los negros hasta donde me alcanza la vista, los calvos, los niños que enredan; pienso que debo hablar con fulano y mengano, he contado tambien los cirios, cuánta gente va de etiqueta, cuantas flores tiene el arbol bajo el que me han sentado Me sigo aburriendo y al fondo sigue sonando la cascada interminable de palabras con que el oficiante nos está dando la paliza ....y mientras me aprietan los zapatos nuevos aun me queda que los hermanos cuenten anécdotas y algun amigo nos asegure que los novios han nacido el uno para el otro o, aun peor, recite alguna poesía y, me temo, que antes de ir al jamón, tendré que soportar los canticos de la tia de la novia que aún se cree tiple frustada o del tio del novio que de joven cantaba zarzuelas.
Bostezo y mi mujer me reprime por lo bajin para que no enseñe las muelas del juicio. Me despierto de golpe y aun doy gracias a Dios porque en esta ocasion el padre de la novia no fué de la tuna.
¿Narración de ficción? Si . La pelicula podria titularse "Terror a la ceremonia" y .. todos la hemos visto..
¿Cuando aprenderemos que los protagonistas de la ceremonia son los novios y los demás figurantes de pocos segundos?
Han pasado los años, mis zapatos han dado de sí y me dicen que algo de razón tengo.